Estatus fonemático del saltillo

La consonante /ʔ/ se llama saltillo o golpe de glote. Fonèticamente, es una oclusiva sorda; y así aparece en la tabla del sistema fonémico. Aunque al nivel fonético aparezca mayormente como rasgo glotal de otro fonema, su estatus de segmento se comprueba claramente no solamente por los pares mínimos que se citan en el §3, #3.a, sino también por el hecho de funcionar, en otros contextos, como alófono de otros fonemas como la /b/ y la /k'/ /v. la sección sobre la reducción de estos fonemas).

Sin embargo, al nivel fonológico (por su comportamiento estructural), el saltillo se distingue fundamentalmente de las otras oclusivas.

Posición fonotáctica del saltillo

Como fonema, el saltillo puede ocupar las siguientes posiciones en la estructura de la sílaba:

  1. al inicio de la sílaba, como en /ʔon/ aguacate
  2. en posición prefinal de la rima, como en /haʔs/ plátano
  3. en posición final de la sílaba, como en /haʔ/ agua y /bulniʔtik/ le mete la nariz.

Reglas fonológicas

Las propiedades fonológicas y fonéticas del saltillo en las posiciones fonotácticas enumeradas son totalmente diferentes. Retomando los tres casos:

  1. Si una palabra empieza con vocal al nivel fonológico, el saltillo se inserta por una regla fonológica obligatoria de prótesis (véase la estructura de la sílaba). Esta es una regla productiva que se verifica cada vez que se importa un préstamo en la lengua; p.ej. esp. algo se pone [ʔàːlgoh] o [ʔàːlkoh] en maya. Aunque el saltillo es, in principio, un fonema, en este contexto no funciona como tal, sino es un automatismo fonético. Nada semejante pasa con ninguna otra consonante.
  2. En posición prefinal de la rima, el saltillo es solamente un coeficiente glotal de la vocal precedente. Por consiguiente, no conserva su naturaleza como fonema en la fonética tampoco, sino se reduce a un rasgo fonético de la vocal. Una palabra como cha'n espetáculo puede tener varias manifestaciones fonéticas, empezando con [ˈʧaʔan] como pronunciación mas cuidadosa y pasando gradualmente por [ˈʧaʔan] y [ʧa̰ːn] hasta a la reducción casi total en [ʧaːn].
    Este proceso es propio del saltillo. Aunque haya otras reducciones de consonantes (véanse los procesos fonológicos), ninguna de ellas convierte la consonante en un rasgo de la vocal vecina.
  3. En posición final de la sílaba, hay que distinguir dos clases de contextos determindos por lo que sigue tal sílaba:
    1. Si esa sílaba es la última de la palabra (o sea, el saltillo cierra la palabra), como en ha' [haʔ] agua, o le sigue una vocal, como en ka'ich [kaʔiʧ] hipócrita, no le pasa nada al saltillo. En esta posición, el saltillo contrasta claramente con los otros fonemas consonanticos; p.ej. [haʔ] agua vs. [hap] abrir [boca] vs. [haʃ] hilar etc.
    2. Si, al contrario, lo sigue una sílaba que empieza por consonante, como en ka'téen dos veces, el saltillo se convierte en coeficiente glotal de la vocal precedente, aplicándosele la misma regla de reducción como en el íten 2 y dando origen a pronunciaciones como [kaʔatéːn] o [ka̰ːtéːn].

Vocales glotalizadas

Una vocal glotalizada (a veces llamada “rearticulada”) es, al nivel morfofonémico, un complejo que consiste de una vocal y un saltillo. Según explicado en el §3, #2, en tal combinación el saltillo se reduce, bajo ciertas condiciones, a un coeficiente glotal de la vocal. Este análisis se demuestra por los siguientes hechos:

  1. Si la oclusiva glotal ocurre en medio de palabra, o sea en un contexto como [ˈʧaʔan] espetáculo, puede parecer que estamos en frente de una palabra bisilábica que obedece el esquema fonotáctico CV1CV2C, subyacente a palabras como chak'an milpa abandonada. Sin embargo, en este esquema, V1 puede generalmente diferir de V2, como lo demuestra la amuestra de palabras de ese padrón que se presenta en la tabla:

    Oclusivas medias en palabras monomorfemáticas
    formasignificado
    k'awis(planta parásita)
    bahuxcuanto
    k'ebanpecado
    heliten vez
    kitamjabalí
    bolingusarapo
    homa'recipiente de calabaza
    ohelsaber
    kusamgolondrina

    Se ve que dentro del padrón CV1CV2C, no hay ninguna restricción sobre las combinaciones de V1 y V2. Sin embargo, existe tal restricción concerniente las palabras de la estructura fonética [CV1ʔV2C]: V1 y V2 deben ser idénticos. No hay ninguna palabra monomorfemática del tipo ba'ux (paralela a bahux), he'it (paralela a helit), ku'am (paralela a kusam) etc.; y no hay ninguna palabra como chi'an, cha'in (paralelas a cha'an) tampoco. Toda palabra que parece contrariar tal regla, como ti'a'l posesión o el ka'ich [kaʔiʧ] hipócrita aducido arriba, consiste de más de un morfema.1
    Este principio se puede hasta usar como pauta metodológica: Si una palabra tiene tal estructura fonotáctica, entonces se puede inferir su composición morfemática y, así, hacer su etimología. P.ej. ta'uch diospyros digyna debe ser, etimologicamente, ta' + uch mierda desplomada (con referencia a su fruto negro).

  2. Del mismo modo, si [ˈʧaʔan] resultara de un esquema fonotáctico bisilábico, debería llevar el acento en la segunda sílaba, como lo hacen todas las palabras de la tabla acima. Sin embargo, ello no es así; la sola acentuación posible es [ˈʧaʔan].
  3. [Viʔ] y [ViʔVi ] están en la distribución complementaria descrita arriba (§3, #2 y 3: la primera variante ocurre en final de palabra y antes de vocal, la segunda antes de consonante, como p.ej. en .a y b.2

    .a.ha' [haʔ] agua
    b.wekha't(eh) [wekhaʔateh] échale agua

    Ahora, la distribución complementaria de dos sonidos es siempre un indicio concluyente de su unidad funcional. En particular, los ejemplos demuestran que el mismo morfema tiene las dos pronunciaciones en dependencia del contexto.

  4. La misma distribución complementaria se observa con respecto a los saltillos que resultan por la regla de reducción de /b/ y /k'/, como se observa en :

    .a.xib [ʃiʔ] macho
    b.xibpaal [ˈʃiʔipàl ] muchacho

    Sea lo que sea aquello que aparece, al nivel fonético, entre la vocal nuclear del primer morfema y el ataco consonántico del segundo en .b, ello proviene de un solo fonema, o sea, de la /b/ subyacente. Este hecho demuestra fuera de duda razonable que no conviene postular, en esa posición, más de un solo fonema.

  5. El hecho de que la vocal de eco que sigue el saltillo antes de consonante es solamente un efecto fonético se verifica también con el infijo /ʔ/. Ese infijo es el morfema de la voz pasiva, como en ko'n-ol venderse. Ahí también se produce la rearticulación: [ kɔʔɔnɔl ].

    Este argumento podría contestarse diciendo que el infijo de pasiva es, en la realidad, /ʔV/. Sin embargo, la reconstrucción interna – en este caso, la comparación del alomorfo /ʔ/ con los otros morfos de voz pasiva como /-bil/, /-ab/ etc. – muestra claramente que la forma subyacente de este morfema es un solo segmento, subyacentemente {b}, pero /ʔ/ por la regla de reducción ya mencionada.

  6. La rearticulación tiene dos componentes lógicos: a) la anaptixis de una vocal después de /ʔ/ cuando lo sigue una consonante; b) la harmonía total de la vocal epentética con la precedente. El primer componente se produce solamente en ese contexto. El segundo tiene un papel mas general en la lengua: Hay muchos sufijos de la estructura /VC/, donde /C/ es una consonante particular, pero /V/ es una copia de la vocal precedente.
  7. Otro argumento del nivel diacrónico en favor de tal análisis es la correspondencia yuc. /ʔl/ - mopán /d/, como en yuc. wa'lik - mopán wadik. Una secuencia /ʔl/ puede cambiarse en /d/, pero dificilmente una secuencia /ʔVl/.

De todo eso se concluye que la vocal idéntica que sigue opcionalmente la oclusiva glotal en posición media es solo un eco de aquella que la precede y no tiene ninguna existencia al nivel morfofonémico. A este nivel, no tenemos {ʧaʔan} (cinco segmentos), sino {[ʧaʔn} (4 segmentos). Ello significa que tal palabra es, al nivel fonológico, monosilábica (cp. Straight 1976:35). La oclusiva glotal en esa posición es solamente un coeficiente glotal, es decir, es mas un rasgo de la vocal que la precede que una consonante auténtica. Por lo tanto, la mayoría de las gramáticas de la lengua designan lo que escriben por V'V como 'vocal rearticulada' y integran esta vocal en el sistema vocálico al lado de V, VV etc. Al nivel fonético, eso es correcto. Sin embargo, eso no debe llevar en el error de que las vocales glotalizadas sean fonemas; son productos de la aplicación de las reglas de acima.

La conclusión de este análisis es la siguiente: Existen vocales rearticuladas al nivel fonético. Sin embargo, como son el producto derivado de la combinación de una vocal sencilla con saltillo siguiente, ellas no tienen ningún estatus al nivel morfofonémico; en otras palabras, no hacen parte del sistema de sonidos de la lengua.


1 La palabra ta'itak casi, si se escribe así, puede parecer una excepción. Sin embargo, esta palabra es bisilábica y se escribe ta'ytak. (Sus componentes son ta'y y tak.)

2 Eso quiere decir que no hay ningún par mínimo de la estructura [haʔ ] vs. [haʔa]. Donde no hay par mínimo, no hay distinción semántica. Como queda explicado en la sección de ortografía, la escritura sólo representa distinciones semanticamente relevantes. De ello se concluye que los sistemas de escritura que escriben <cha'an> están equivocados.